Una de las cosas que más me gusta de usar docker no es ya el hecho de que puedo probar todas versiones de los distintos sistemas que van apareciendo, es el hecho de que PARA PROBAR Y USAR CUALQUIER SERVICIO Y CUALQUIER APLICACIÓN NO TENGO QUE INSTALAR NADA EN MI SISTEMA, sea cual sea el servicio o la aplicación que se me ocurra, siempre la tengo en Docker Hub. Solo tengo que buscarla, averiguar cuál es la versión que quiero y lanzar el contenedor o contenedores necesarios. Y si por casualidad no está lo que yo quiero siempre podré construirlo desde cero, cosa que veremos en el módulo 6.
No es ya que al evitar la instalación evite la sobrecarga que eso supone y la cantidad de ficheros y "basurilla" que van dejando este proceso, es que el uso de contenedores de este tipo impacta de manera muy favorable en mi práctica docente en al menos dos aspectos:
- Me va a permitir utilizar servicios y aplicaciones que a veces, dadas la limitada potencia de los equipos de aula que tenemos, es difícil que podamos usar con soltura.. Recordad que una de las características de los contenedores es que eran entornos de ejecución aislados (no dejan basura ninguna si los elimino) y que la sobrecarga sobre el sistema era mínima si lo comparábamos con una máquina virtual arrancando, consiguientemente, de una manera mucho más rápida.
- Elimino de una vez el problema que tantos quebraderos de cabeza nos da: "EN MI EQUIPO NO FUNCIONA". En cualquier equipo donde se haya instalado docker de manera previa el contenedor que quiero que los demás usen va a funcionar con total seguridad.
De momento en este apartado nos vamos a centrar en servicios de un solo contenedor, estamos hablando de servidores de bases de datos, servidores web, servidores de aplicaciones etc... servicios que por otra parte son de uso casi diario en nuestras aulas. Veremos en módulos posteriores aplicaciones que requieren la interacción de más de un contenedor.
Para la ejecución de contenedores de este tipo vamos a tener que en cuenta varias cosas:
- Usar el flag -d para que el servicio se ejecute en modo background o dettach. Si no lo hacemos se bloqueará el terminal mostrando el log del servicio (en ciertas ocasiones puede interesarnos) y tendremos que salir del mismo con Ctrl+C. Esto para el contenedor aunque podremos arrancarlo posteriormente.
- Si queremos que el servicio que vamos a lanzar sea accesible desde el exterior tendremos que añadir el flag -p de la siguiente manera -p PUERTO_EN_HOST:PUERTO_EN_CONTENEDOR que normalmente sería el puerto por defecto del servicio. Esto es una REDIRECCIÓN DE PUERTOS. Podemos tener varias reglas -p al arrancar (dependiendo del servicio será necesario) y es muy importante recordar que no podemos tener dos servicios escuchando en el mismo puerto. Si lo intentamos se nos mostrará un mensaje de error.
- Comprobar y definir si es necesario las variables de entorno que puede tener el contenedor. Las variables de entorno importantes se describen en la página de las imágenes en DockerHub y para usarlas tenemos que usar el flag -e NOMBRE_VARIABLE=VALOR.
Para ilustrar todo esto vamos a poner varios ejemplos:
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# Ejecuto un servidor Apache sin el flag -d ni redirección de puertos. Se bloquea el terminal mostrando los logs y tendré que salir con Ctrl+C > docker run httpd AH00558: httpd: Could not reliably determine the server's fully qualified domain name, using 172.17.0.22. Set the 'ServerName' directive globally to suppress this message # Ejecuto un servidor Apache en background y accediendo desde el exterior a través del puerto 8888 de mi máquina. > docker run -d -p 8888:80 httpd # Creación de un servidor de base de datos mariadb accediendo desde el exterior a través del puerto 3306 y estableciendo una contraseña de root mediante una variable de # entorno > docker run -it -d -p 3306:3306 -e MYSQL_ROOT_PASSWORD=root mariadb |